Macronutrientes: El Fósforo (I)

Publicado el 04/04/2013 por info@agrobeta.com

El descubrimiento del fósforo fue hecho en 1669 por el alquimista Henning Brand de Hamburgo, el primer hombre conocido que descubre un elemento. Buscando la piedra filosofal Brand destiló una mezcla de arena y orina evaporada, y obtuvo un cuerpo que tenía la propiedad de lucir en la oscuridad. Se llamó “fósforo de Brand”, para distinguirlo de otros materiales luminosos denominados también fósforo.

El fósforo, es un elemento químico de símbolo P. Perteneciente al grupo del nitrógeno, se encuentra  en la naturaleza combinado en fosfatos inorgánicos y en organismos vivos pero nunca en estado nativo. Es un reactivo y se oxida espontáneamente en contacto con el oxígeno atmosférico emitiendo luz (fenómeno llamado fosforescencia) y formando pentóxido de fósforo. En estado puro es incoloro y es insoluble en agua por lo que se almacena en él. Existen varias formas de presentarse, siendo las más usuales el fósforo blanco y el rojo (cerillas). El negro presenta una estructura similar al grafito y es conductor de la electricidad. El fósforo es empleado en la agricultura como parte de los fertilizantes.

El fósforo se almacena en rocas fosfatadas y a medida que estas son erosionadas van liberando compuestos fosfatados hacia el suelo y el agua. Después de esto, son absorbidos por las plantas, a través de las raíces, incorporándose a los componentes vivos del sistema. Una vez que las plantas mueren, se descomponen y se libera el fósforo contenido en la materia orgánica.

Una gran cantidad de fósforo se obtiene de las minas de rocas de fosfato, que afloran en superficies como resultado de viejos fondos marinos. Este es el fósforo que se puede utilizar dentro de la Agricultura Ecológica como abono ecológico  El fosfato en crudo se usa en la agricultura orgánica (abonos ecológicos , mientras que los fostatos tratados químicamente, como los superfosfatos, trifosfatos o fosfato de amonio, se usan en la agricultura convencional.

El fósforo es uno de los nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas. Las funciones que ejerce no pueden ser realizadas por ningún otro nutriente y se requiere un adecuado suplemento de fósforo para que la planta crezca y se reproduzca en forma óptima. Es clasificado como un nutriente primario, razón por la cual es comúnmente deficiente en la producción agrícola y los cultivos lo requieren en cantidades relativamente grandes.

El fósforo penetra en las plantas a través de las capas externas de las células de los pelos radiculares y de la punta de la raíz.

El fósforo es un componente vital de las sustancias que forman los genes y cromosomas. De esta forma, este elemento es parte esencial de los procesos que transfieren el código genético de una generación a la siguiente, proveyendo el mapa genético para todos los aspectos de la planta. Abundante cantidad de fósforo se acumula en las semillas y en el fruto donde es esencial para la formación y desarrollo de la semilla. Poco fósforo puede reducir el tamaño, número y viabilidad de las semillas.

Los efectos más notables en una deficiencia de fósforo se puede observar en el crecimiento de la hoja así como en el número de hojas. El crecimiento de la parte superior es más afectado que el crecimiento de la raíz. Sin embargo, el crecimiento de la raíz también se reduce marcadamente en condiciones de deficiencia de fósforo, produciendo menor masa radicular. Una cantidad de fósforo inadecuada deprime los procesos de utilización de carbohidratos, aun cuando continúa la producción de estos compuestos por medio de la fotosíntesis. Cuando hay deficiencias de fósforo, las hojas desarrollan un color púrpura, ejemplos son el tomate y el maíz.

Debido a la fácil movilización del fósforo en las plantas, cuando ocurren las deficiencias de este nutriente el fósforo se transloca de los tejidos viejos a tejidos meristemáticos activos y por esta razón los síntomas aparecen en las hojas viejas de las plantas.

Otras de las secuelas de la deficiencia de fósforo en las plantas son el retraso de la madurez, mala calidad de forrajes, frutas, hortalizas y granos así como una reducción de la resistencia de las plantas a las enfermedades.

En agricultura se ofrecen productos sometidos a diversos tratamientos para mejorar su presentación y solubilidad.:

–       Tratamientos físicos: Se selecciona y se muele más o menos de manera fina los fosfatos naturales, llegándose a los fosfatos molidos.

–       Tratamientos térmicos: Se muelen y se calcinan los fosfatos de cal o aluminio-cálcicos, con o sin adición de silicatos, obteniéndose los tratados calcinados y el Phospal.

–       Tratamientos químicos: Se atacan los fosfatos naturales con uno o varios ácidos, bien para solubilizar el fosfato tricálcido, pasándolo al estado bicálcico o monocálcico, bien para producir ácido fosfórico.

Se pueden encontrar los siguientes abonos fostatados:

–       Superfosfato normal o superfosfato simple. Es un producto obtenido por reacción del fosfato mineral triturado con ácido sulfúrico y que contiene como componentes esenciales fosfato monocálcico y sulfato de cal o yeso, aproximadamente al 50% en peso. Se puede observar que la riqueza del superfosfato simple depende de la calidad del fosfato natural utilizado

– Superfosfato enriquecido. Este producto se obtiene por reacción del fosfato mineral triturado con ácido sulfúrico y ácido fosfórico, por lo que cabe obtener una gama de productos cuya riqueza va de 25 a 35% de ácido fosfórico, soluble en agua y citrato. También contiene una proporción importante de sulfato de cal, que corresponde a una riqueza de 5 a 9% de azufre (los más concentrados don los que poseen la menor cantidad de azufre).

– Superfosfato triple. Producto obtenido por reacción del fosfato mineral triturado con ácido fosfórico y que contiene como componentes esenciales fosfato monocálcico. Debido a su alta concentración, resulta muy útil en la preparación de mezclas muy concentradas.

– Otros. Como escorias de desfosforación (fosfatos Thomas, escorias Thomas), fosfato natural parcialmente solubilizado, fosfato precipitado bicálcico dihidratado, fosfato calcinado, fosfato aluminocálcico, fosfato natural blando.

Los superfosfatos normales, enriquecidos o concentrados, pueden aplicarse a todos los cultivos y no solamente en los abonados de fondo, como los restantes abonos fosfóricos, sino también en cobertura y localizados, con el fin de asegurar la alimentación fosfatada de las plantas en momentos críticos.

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